dar, dar, dar y dar...
dar sin razón alguna, ¿es tan difícil de entender?
para algunos sí... y casi me envenenaron con su aguda razón: "nadie dá nada sin alguna intención por detrás"
¿qué les sucedió para que perdieran la fé en sí mismos de que pueden recibir porque lo valen?
eso es porque sus propias acciones los llevó a desconfiar de los demás.
Hubo Uno que lanzó semillas a distintos suelos, algunas brotaron pero murieron, otras no pudieron nacer pero hubo otras que brotaron y crecieron a medida que recibieron el calor del sol, la humedad de la tierra y la ayuda de los insectos para airear el suelo y como poda... la perseverancia y constancia son unos de los abonos importantes en la vida. Yo casi abandoné ese trabajo, y casi pierdo lo que había conseguido obtener en mi jardín, espero poder recuperarlos.
Dar, dar y dar sin razón alguna, hoy más que nunca lo tengo bien en claro.
2 comentarios:
Yo lo pensaba así antes, y nacemos queriendo darlo todo, pero nos encontramos con situaciones que nos obligan a desconfiar. Pero son las buenas intenciones y la naturaleza buena de las personas las que pueden cambiar eso.
Yo precisamente suelo hacer lo que dices todo el año, y cuando me vienen estos días con buenas palabras me suena a falso y prefiero refugiarme en mis historias, fotos e instantes con amigos.
Hay que dar y ya está, pero tampoco darlo todo. Nos puede hacer falta para mañana. Dosifica amiga.
Cuanta verdad querido amigo... sí, he dado mucho, demasiado de mí antes, hasta que un día me dí cuenta que no me quedaba para mí y fue justo cuando más me necesité. Fue entonces que en medio de mi desnudez espiritual, varias personas me cobijaron con sus abrazos, sus sonrisas, sus oídos, su atención: la amistad pura; por eso dije que el 2011 fue una visagra, porque pude volver a mí y sé quienes están conmigo en verdad.
Estoy comprendiendo el valor de dosificarse... pero mi cántaro siempre estará brindando :)
Abrazo fuerte y besos en cada mejilla!!!
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