martes, 4 de enero de 2011

Hacia un sin fín

Muéstrame tus alas
y tómame con ese aire energético.

La calidez brillante que brota de tí
es como canto pulsante hacia mi torrente sentido.
Tengo fuertes deseos de llorar.

Hierven mis culpas y mis demonios ante tu voz.

Si tan solo pudiera alcanzar tu virtud
tendría la suficiente habilidad para enfrentar con templanza al Dolor
que me ahoga con mi propia respiración...

El Tiempo se derrite sobre esta arena
pero mi brazos están nadando en el viento que no cesa de batir,
que no cesás de batir...


···

Escrito hace tiempo que ya no recuerdo cuanto y que fue retocado en este preciso momento.

···

3 comentarios:

EL DOCTOR BARRETT dijo...

Siempre haces alusión a seres angelicales, que aunque sean de este mundo, supongo yo, tienen un aura o un algo que hace que tu alma se revolucione.

Como ya he leído, este escrito es de hace tiempo, y lo has recogido de tu baúl particular.

Yo también suelo leer mis cosas de hace años y la verdad es que parezco otra persona. No siempre soy el mismo.

Un abrazo y no te ahogues con las sombras, que siempre habrá luces dispuestas a guiarte.

Lorena Perez dijo...

Después de la muerte de mi hermano tuve mi etapa "mística" hasta pasada la adolescencia, ahora saco conclusión que fue una manera de subliminar esa gran ausencia...
Cuando escuché el tema de DCD, tan pasional y profundo recordé ese texto y ni bien lo encontré en mi viejo cuaderno le retoqué algunos términos guiándome con la música...

Es cierto lo que decís sobre nuestros viejos textos... me asombra las cosas que escribí, un poco por la ingenuidad (obvia, je!) y otro poco por esas revoluciones que percibiste también

Muchas gracias Rober! ^_^
Hermoso tu frase final!
Abrazo fuerte!!!

Tegala dijo...

Es muy hermoso. Es cierto que a veces nos sorprenden nuestras propias palabras del pasado... Muy sentido, muy hermosos...